Un bonito amanecer en los Escullos, en el que al sol le daba vergüenza asomar, y salia timido de su madriguera, por lo que tuvimos tiempo de explorar los rincones de la zona y poder dedicarle tiempo a fotografiar otros espacios antes de que pudieramos deslumbrarnos con la luz directa del sol. Entre ellos, os dejo esta primera imagen, las escaleras por las que tuvimos que bajar a la cala, peculiares sin duda, pero que nos facilitaron el poder descubrir un bonito paisaje!. Espero os guste.
Cuando el Sol nos dejó verlo, se encontraba ya demasiado alto para como me hubiese gustado ver, pero esos son los caprichos de la naturaleza, esperemos en otra ocasion se muestre mas permisivo en este aspecto, y nos deje disfrutar de toda su belleza en cada segundo de su despertar.
Y entre tanto, ellos a lo suyo, y yo a lo mio, como paparazzi detras de estos dos genios a captar como ellos captan! jajaja
La primera me encanta, me gusta las fotos en las que se pasan por alto estos pequeños detalles
ResponderEliminarGracias Ana!
ResponderEliminarUna estupenda serie, Mar. La de la escalera es fantástica, la de tu maridito, es genial y la mía . . . jejeje
ResponderEliminarGracias "Nodriman" ;-)
ResponderEliminar